La verdad es que me paso muy poco por aquí, y aunque en ocasiones me he planteado no volver a publicar más, siempre pienso que aquí surgió todo y aunque ahora los blogs no estén en su mejor momento quiero seguir publicando por aquí.
Se que en estos momentos ni si quiera respeto la periodicidad en las publicaciones que me propuse en los inicios, pero creo que es bueno seguir pasándome de vez en cuando, y contando nuestros proyectos de manera más detallada.
Y ese es precisamente el motivo por el que hoy estoy aquí, para contaros uno de nuestros últimos proyectos y poder mostrarlo con mayor detalle.
En realidad, y como soy lo peor, este proyecto lo hicimos hace algún tiempo («hola ataquito de sinceridad») pero revisando el blog me he dado cuenta que no estaba y he pensado que es una buena forma de volver por aquí. Por eso, vamos al grano que me lío y me pongo a hablaros por aquí de mis líos y no paro.
Hoy os vamos a enseñar un pequeño cambio que hemos hecho en casa, en concreto en el rellano de la escalera. Es un rellano bastante amplio y luminoso, pero la verdad es que no le estábamos sacando el partido que se merece.
La única pega que tiene es que el techo es algo bajo, sobre todo comparado con el resto de la casa, pero es muy amplio, luminoso y además la pared estaba nueva después de la última obra que hicimos.
Por ello nos decidimos a hacer algo que respetara toda esa luz que entra pero que nos ayudara a que se viera distinto y conseguir terminar esa zona por fin.
Tras varias ideas, la idea ganadora fue crear un degradado en la pared. Esta idea resultó ser la ganadora ya que así podíamos introducir algo de color respetando las paredes claras que es lo que en un inicio teníamos claro.
¿Y cómo hacer un degradado en casa de forma fácil y rápida? pues con una de nuestras herramientas preferidas, las pistolas de Wagner.
Utilizamos la pistola grande, la W450, la misma que utilizamos cuando pintamos el mural en el patio ¿lo recuerdas?
Antes de comenzar a pintar el rellano, lijamos con una lija suave la pared y limpiamos todo el polvo. Al mismo tiempo, protegemos bien toda la zona y encintamos todo aquello que no queremos que se pinte.
Como veis protegimos bien las ventanas tanto con cinta como con papel -por supuesto todo de Miarco– y el suelo con un plástico protector. Siempre es importante cubrir bien pero con las pistolas siempre llevamos especial cuidado porque es más fácil manchar sin darte cuenta. Sobre todo si eres como nosotros que nos ponemos a hablarnos apuntandonos con la pistola encendida y en ocasiones nos hemos manchado un poco más de la cuenta.
Llega el momento de comenzar a pintar. A pesar de que la pared es nueva y no ha sido pintada con anterioridad, vamos a aplicar una imprimaci´on para obtener un mejor resultado y que la pintura tenga mejor adherencia.
Por supuesto optamos por una de nuestras marcas de confianza: Montó.
A la hora de pintar con pistola (o compresor) es muy importante la dilución de la pintura ya que ello determinará como sale la pintura y por lo tanto como se aplica por la pared, por eso siempre os recomendamos que sigáis al pie de la letra las recomendaciones del fabricante en cuanto a los porcentajes a la hora de diluir (esto puede variar dependiendo del tipo de pintura o del fabricante).
Cuando aplicamos el agua para la dilución -todas las pinturas que utilizamos en casa son en base agua- es muy importante que removamos bien hasta que quede una mezcla homogénea.
Es el momento de montar nuestra pistola para poder ponernos manos a la obra. Es muy sencillo y en nada estaremos listos para pintar.
Como lo que vamos a pintar son paredes, y aquí servidora no es muy alta que digamos, empleamos el extensor de Wagner, un complemento ideal y super fácil de utilizar que nos ayuda a llegar de manera muy fácil y sin escalera a las zonas más altas. Se coloca entre el soporte y el depósito y ya podemos comenzar.
Gracias al extensor y la pistola en nada de tiempo tenemos toda la imprimación aplicada y ya solo nos queda esperar a que se seque para poder comenzar a pintar.
Con la imprimación siempre os recomendamos que la dejéis secar bien, siempre el tiempo que recomienda el fabricante, para que así la adherencia sea perfecta y no surja ningún contratiempo. Nosotros por costumbre la dejamos como mínimo 24h.
Tras pasar este tiempo de secado llega el momento de comenzar a pintar con los diferentes colores y conseguir el degradado sutil que estamos buscando.
Del mismo modo que hemos hecho con la imprimación, es muy importante diluir la pintura antes de comenzar a pintar. En nuestro caso vamos a comenzar a pintar por el color más claro para conseguir de este modo el degradado.
Con este color pintamos más o menos hasta la mitad de la pared.
Para continuar con el siguiente color del degradado mezclamos a partes iguales este tono más claro y el más oscuro y lo diluimos de nuevo.
Una vez tenemos la franja lista, podemos seguir pintado. No es necesario esperar a que seque del todo.
El truco para que el degradado quede bien, es superponer un poco el color, es decir como hemos pintado más o menos hasta la mitad de la pared, tenemos que pintar un trozo encima del anterior color y seguir pintado un poco más hacia abajo.
Para terminar, seguimos con el último color en este caso el tono más oscuro. Seguimos los mismos pasos que con el color anterior.
Una vez hemos pintado con nuestros tres tonos de color dejamos secar completamente y ya podemos retirar la cinta de enmascaras.
Hay que decir que gracias a la W450 pudimos hacerlo todo en a penas dos tardes, una para proteger y aplicar la imprimación y otra para hacer el degradado en sí. Además con la pistola es mucho más cómodo y rápido que con el rodillo. Incluso te la puedes colgar para ir más cómodo.
Con todo limpio ya solo nos queda ultimar los detalles, como poner los rodapiés y los stores en las ventanas.
Para fijar el rodapié lo hemos hecho con la cinta de montaje de doble cara de Miarco, ya hemos puesto algunos otros así en casa y estamos encantados con el resultado. Es muy my fácil y limpio.
Los stores que hemos comprado se llaman noche y día, nos encantan para esta zona ya que podemos jugar con la cantidad de luz que entra en esta zona y además, quedan muy bonitos y son muy muy sencillos de montar.
Y listo! y tenemos nuestro rellano terminado y por fin parece una estancia de la casa ocupada.
Si lo queréis ver en movimiento, os dejamos por aquí el vídeo:
¿Qué os parece? Nos encantaría saber vuestra opinión!
Esperamos volver pronto por aquí. El verano ya va llegando a su fin y aunque a penas se nos note ya nos estamos poniendo las pilas para volver de nuevo a la rutina y enseñaros muchas muchas cosas.
Besacos a puñaos!